Santiago de Chile es una de las capitales más grandes que he visto en comparación a la población total de su país; Chile. Con más de 5,6 millones de habitantes, Santiago aloja a más del 30% de la población chilena. ¡Una locura!
Llegamos justo después de nuestra aventura en Isla de Pascua, la cual pudimos visitar gracias a los trucos y consejos para ahorrar que nos organizamos para no arruinarnos en una de las islas más caras que he conocido!
Pasamos 5 días en esta gigantesca ciudad alojándonos en casa de Martín (un buen amigo al que conocí en mi viaje a Myanmar) y con quien descubrimos un montón de lugares geniales e hicimos un montón de cosas no turísticas que te cuento más abajo!
¿Qué hacer en Santiago de Chile?
– Hacer un freetour por el centro
Como siempre recomiendo en las grandes ciudades, una buena opción para enterarte de las cosas básicas y de la historia más general es hacer un freetour; un tour caminando por el centro en el que tú decides el precio. Suele durar entre 3-4h y generalmente lo hace alguien local, por lo que podrás preguntar todas las dudas que tengas!
Si te interesa hacer un freetour por Santiago, tienes uno muy recomendable en este enlace.
– Subir al mirador de Cerro Manquehuito
Un increíble mirador cero turístico al que nos llevó Martín. Las mejores vistas de Santiago están sin duda en esta pequeña montaña situada a las afueras de la ciudad. ¡Infinitamente mejor que el Cerro San Cristóbal! (al que va todo el mundo)
– Pasear por la Plaza de Armas
Un lugar céntrico pero especial. En esta pequeña plaza podrás relajarte en alguno de sus bancos, tomar algo o comerte un bocata y descansar de las caminatas. Está rodeado de lugares (aunque algo turísticos) donde probar el típico “completo italiano” (perrito caliente con mayonesa, aguacate y tomate, que simula la bandera de Italia).
– Probar el “terremoto” y el “piscola”
Seguramente las dos bebidas alcohólicas más populares de Chile; el “terremoto” está hecho de pisco, pipeño (vino malo), helado de piña y granadina, mientras que el “piscola” es simplemente pisco con coca-cola. ¡Geniales!
– Tomar algo por Bellavista
La zona de fiesta por excelencia en todo Santiago. Bellavista es un barrio repleto de bares, discotecas (abiertas y cerradas), terrazas y restaurantes. Está prácticamente muerto durante el día; se despierta cuando cae el sol y aguanta a tope hasta bien entrada la madrugada.
– Visitar el Museo de Arte Contemporáneo
Un museo de arte contemporáneo muy bien organizado, con exposiciones muy interesantes (al menos cuando lo visitamos nosotros) y con entrada gratuita. ¡Perfecto para desconectar un poco del ajetreo y ruido del centro e inspirarse con obras de arte!
– Hacer uno de los alucinantes trekkings por los Andes
Un planazo para los amantes de la naturaleza y la montaña. A menos de una hora de Santiago hay infinidad de trekkings que hacer por la gigantesca Cordillera de Los Andes, en la que podrás experimentar la sensación de subir a más de 3.000 metros de altitud (y de paso, comprobar si te afecta el mal de altura como hicimos nosotros!).
Recomendado por un chileno que conocí subiendo el Volcán Villarrica, hicimos el trekking de los Tres Picos; una caminata de unas 5-6 horas (ida y vuelta) que se inicia en la estación de esquí de La Parva y en el que se hacen tres cimas; la Falsa Parva, la Parva y, como colofón y objetivo del trekking, el Cerro Pintor (4.180m). ¡Una barbaridad de vistas y de experiencia!
– Recorrer las calles y mercadillos del centro
Casi todas las calles del centro tienen vendedores ambulantes con mil cosas; gafas de sol, pantaloncillos de tela, accesorios para el móvil y un montón de chorradas más a precios ridículos. Llegamos a ver una tarjeta de memoria de 32Gb por 1€. ¡Nada mal para comprar alguna cosa que te pueda hacer falta para el resto del viaje!
– Probar algo de comida local
Un obligatorio cuando se visita una ciudad o país nuevo; probar algo de su gastronomía. En el caso de Chile, algunos de sus platos más típicos podrían ser las empanadas, las humitas o el charquicán. ¡Buen provecho!
– Recorrer Londres, París y Nueva York en media hora
En la zona del centro se encuentran Londres, París y Nueva York; unas calles bastante representativas y con un estilo arquitectónico totalmente diferente. ¡Están tan cerca que podrás recorrerlas en menos de media hora!
– Cogerle el gusto al “mote con huesillo”
Otra bebida súper famosa en Chile a base de durazno deshidratado (albaricoque), néctar del mismo y mote (trigo cocido).
Lo más típico es subir el Cerro San Cristobal andando (o corriendo) y bebérselo en la cima para recuperar energía, aunque el centro está lleno de carritos que lo venden. ¡No te puedes ir sin probarlo!
Después de pasar unos días disfrutando de Santiago y actualizando el blog, nos movimos a Valparaíso para pasar dos noches antes de poner rumbo al norte de Chile, donde visitaríamos el famoso Desierto de Atacama entre otras muuuuchas cosas!