Santa Marta fue nuestro anteúltimo destino en nuestra ruta de 3 semanas por Colombia antes de visitar Bogotá y poner fin a nuestro maravilloso viaje de 5 meses recorriendo Sudamérica.
Pasamos tres días disfrutando del calorcito y de la playa y también aprovechamos para trabajar, ya que encontramos uno de los mejores lugares para currar de todo el viaje!
En este post te cuento las mejores cosas que hacer en Santa Marta y Taganga, desde sus playas hasta sus rincones más secretos!
¿Dónde dormir y trabajar en Santa Marta?
En Santa Marta encontramos uno de los mejores lugares para dormir y trabajar de todo Sudamérica. El Hostal Flamingo Coworking tiene todo eso que un buen nómada digital necesita; un wifi estupendo, una habitación cómoda con aire acondicionado y lugares adaptados para trabajar. ¿Qué más se puede pedir…?!
Además, está situado en pleno centro y a 5 minutos caminando del malecón y la playa. ¡Una verdadera maravilla!
Estuvimos realmente cómodos y, trabajes como nómada digital o no, te recomiendo sin duda este hostal para tus noches en Santa Marta!
¿Qué ver y hacer en Santa Marta?
– Pasear por el Malecón y ver el atardecer
Un malecón lleno de ambiente y música y con muy pocos turistas extranjeros, lo que se agradece bastante, ya que te permite sentir más de cerca el espíritu colombiano!
Te recomiendo ir para ver el atardecer y poder ver de cerca la vida y el contraste entre la sociedad colombiana, además de para probar la comida callejera que podrás encontrar prácticamente cada dos metros!
– Tostarse al sol en la playa
La playa de Santa Marta no es muy bonita que digamos. Tiene los edificios mastodónticos de la zona rica de la ciudad a su izquierda y el gigantesco puerto repleto de contenedores a la derecha, pero para darse un par de baños y tumbarse un rato al sol es igualmente válida!
– Conocer a los colombianos más de cerca
Si tienes interés en conocer un poco más de cerca la cultura de Colombia, te recomiendo utilizar Couchsurfing y compartir alguna cerveza con alguien local. Descubrirás de primera mano lo cálida que es la gente y aprenderás un montón sobre cómo es la vida aquí.
Nosotros compartimos un rato con un chico colombiano y una chica boliviana que llevaban meses viajando juntos y nos contaron de todo; desde cómo falsificar sellos de pasaporte para poder volver a Bolivia hasta cómo tuvieron que correr en varias ocasiones peligrosas que les tocó vivir en algunos rincones poco recomendados de Colombia… ¡menudas historias!
– Probar la comida callejera
¡Otro típico que no puede faltar en ningún rincón del mundo! En Santa Marta encontrarás, como en casi todo Colombia, infinidad de puestos de comida callejera; chorizo, pinchitos de carne, arepas de todos los colores y sabores, empanadas y un largo etcétera para que pruebes!
Sin duda una manera fantástica de conocer la cultura local, ahorrar dinero y probar un montón de comida rica! Por ponerte un ejemplo, el chorizo entero con papa nos costó 3.000 pesos (0,80€), el pincho moruno 2.500 (0,65€) y las arepas y empanadas suelen en torno a los 1.000 pesos (0,30€).
Planazo de cena: chorizo + pincho moruno + cervezas!
– Llegar hasta Taganga y sus playas
Como te cuento más abajo, Taganga es la opción perfecta para salir del bullicio de la ciudad en Santa Marta y relajarte un poco en alguna de las playas de este pequeño pueblo de pescadores.
Tampoco es que sean para mucho, pero sus playas son al menos mejores que la playa de Santa Marta!
– Visitar el Parque Nacional de Tayrona
Si tienes en mente visitar el Parque Nacional de Tayrona, desde Santa Marta puedes hacerlo. En el artículo de “Parque Tayorna: ¿Merece tanto la pena como dicen?” te cuento todo sobre el parque, cómo llegar y dónde dormir.
Ver el post completo sobre el Parque Tayrona
– Adentrarse en la Quinta de San Pedro Alejandrino
Una curiosa y bonita hacienda construida en el siglo XI y en donde el famoso libertador Simón Bolívar pasó los últimos días de su vida. Su arquitectura, sus inmensos jardines y la historia que este lugar guarda es sin duda un obligado para visitar en Santa Marta!
La entrada para extranjeros es de 22.000 pesos (unos 6€).
– Otras cosas que hacer en Santa Marta
Si tienes más días en Santa Marta o quieres aprovecharlo a tope, también tienes otras opciones como visitar Minca (un pequeño pueblo cafetero) o llegar hasta la Ciudad Perdida (4-6 días de trekking).
Como ves, ¡planes no te faltarán en Santa Marta!
Cómo llegar a Taganga desde Santa Marta
Llegar a Taganga desde Santa Marta es súper fácil. Tan solo tienes que coger uno de los autobuses que pasan cada 10 minutos por la Carrera 5 y en los que podrás ver el letrero de “Taganga”. Cuesta 1.900 pesos (0,50€) y tarda unos 20 minutos en llegar hasta el centro de Taganga.
Los autobuses circulan desde las 7 de la mañana hasta las 9 de la noche aproximadamente, aunque si te alojas en Santa Marta no te recomiendo volver de noche por las zonas poco amigables que pasa el autobús, ¡mejor evitar riesgos!
La otra opción es llegar en taxi, que tardará 5 minutos menos que el autobús y te cobrará unos 15.000 pesos (unos 4€) dependiendo tus dotes de regateador.
En el barco camino de Playa Grande desde Taganga (5.000 pesos/persona ida y vuelta)
¿Qué ver y hacer en Taganga en un día?
Nos imaginábamos Taganga como un lugar de playas salvajes y paradisíacas; algo así como lo que nos encontramos en Palomino, pero no acertamos ni de lejos. Las playas de Taganga son más parecidas a Benidorm que a cualquier postal del paraíso. Aún así, disfrutamos mucho nuestra visita a Taganga de un día y, aunque compartimos playa con cientos de domingueros, pudimos vivir más “de cerca” la cultura y el ambiente colombiano, ¡por lo que no estuvo nada mal!
Taganga es un pueblo muy pequeño, por lo que se puede recorrer paseando en menos de media hora. En sí el pueblo no tiene mucho, realmente la gente llega aquí en busca de sus playas o de las excursiones diarias que salen en barco hacia el Parque Nacional de Tayrona (y sus playas, claro).
Nosotros ya habíamos visitado Tayrona y no queríamos volver a pagar el sablazo de su entrada (hay que pagar una vez cada día que quieras visitarlo, aunque sólo quieras ir a sus playas), por lo que ni nos planteamos hacer una excursión e invertimos el día entero a las playas gratuitas de Taganga.
La más popular es Playa Grande, a la que se llega en un barco desde la playa principal de Taganga (pagamos 5.000 pesos por persona ida y vuelta; poco más de 1,30€) y en la que compartirás el sol con cientos y cientos de locales (al menos en domingo, que es cuando fuimos nosotros).
Vistas desde la toalla a la hora del mediodía
Vistas desde la misma toalla, ya después de comer…
Este fue el panorama que tuvimos casi todo el día en Playa Grande!
Estas cosas hay que tomárselas con humor… ¡viva nuestra playa virgen entera para nosotros! jajaja
La otra opción es la propia playa que hay en el pueblo de Taganga, pero entre la suciedad que hay y los barcos que se amontonan en ella, no merece demasiado la pena.
Playa de Taganga. Como ves… nada del otro mundo y bastante sucia!
En estas playas el agua se bebe en «bolsas» 🙁
Tras unos días en Santa Marta disfrutando de la playa y trabajando a tope, cogimos un vuelo hasta Bogotá, el último destino de estas 3 semanas recorriendo Colombia por libre y también la última ciudad de nuestra ruta de 5 meses viajando por Sudamérica!