Recorrer el Desierto de Atacama por libre y disfrutar de su mezcla de paisajes, fauna y contrastes fue una de las cosas que más disfrutamos de todo Chile. Quizá fue por la cantidad de paz que se respira en este lugar; tal vez por sus infinitos paisajes sacados de otro planeta, o tal vez por el hecho de recorrerlo por libre junto a un grupo de gente estupenda, pero Atacama nos dejó muy buen sabor de boca!
En este post te cuento lo esencial para poder descubrir las maravillas del Desierto de Atacama por libre, así como algunos rincones secretos que Rabel, un amigo que ya estuvo anteriormente explorando la zona, nos fue enseñando durante los tres días que pasamos en la zona.
Bienvenido al desierto; ¡Bienvenido a Atacama!
¿Cómo llegar a San Pedro de Atacama?
Llegar a San Pedro de Atacama es bastante sencillo a pesar de estar, literalmente, en el medio de la nada.
Probablemente llegues desde Calama si vienes recorriendo Chile desde el sur (al igual que nosotros), aunque también puede ser que llegues desde Uyuni haciendo algún tour o, en el caso menos habitual, desde Argentina.
En todos los casos la opción más accesible y económica es el autobús. En cualquier terminal puedes consultar precios y, si tienes un poco de habilidad, ¡hasta regatearlos! Desde Calama hay salidas prácticamente durante todo el día y el billete cuesta 3000 pesos (4€).
Otra buena opción (perfecta si vas en grupo) es alquilar una camioneta en el propio Calama para recorrer el Desierto de Atacama por libre y ahorrarte los infinitos tours que hay para hacer allí. Nosotros nos con unos amigos que estaban haciendo un pequeño viaje por Chile, por lo que fue la opción clave para que los días en Atacama fuesen insuperables; pagamos apenas 26€ cada uno por tres días de alquiler de dos furgonetas con las que subimos y bajamos todos los rincones del desierto!
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¿Dónde dormir en San Pedro de Atacama?
Aunque es un lugar lleno de lugares mágicos, San Pedro de Atacama no deja de ser un destino turístico. Y eso se nota en los precios; la mayoría de alojamientos son más caros de lo habitual para lo que ofrecen.
Pero tranquilo, ¡tengo la solución! Buscando en Airbnb encontramos un lugar que, además de ser barato, fue la opción perfecta para descansar, ver estrellas y hasta probar comida local!
Su anfitrión, Diego, es un tipo estupendo con el que podrás conversar y compartir ratos! Aquí tienes el enlace al apartamento y aquí te dejo 25€ de descuento en tu primera reserva con AirBnb!
¿Qué ver y hacer en el Desierto de Atacama?
– Ver el atardecer en el Valle de la Luna
Un lugar que hace honor a su nombre; y es que los paisajes que ofrece el Valle de la Luna son, literalmente, de otro planeta… ¡Ve con tiempo y contempla el atardecer desde la entrada que hay saliendo por la carretera si quieres ahorrarte la entrada!
– Amanecer en los Geiseres del Tatio
Situado a 4.290m sobre el nivel del mar, los Geiseres del Tatio componen el campo geotérmico más alto del mundo y reúne el 8% de geiseres que existen en el planeta. Aunque el lugar es súper bonito, el hecho de estar bastante lleno de turistas hizo que tuviese menos gracia de la que pudiese tener.
La mejor hora para disfrutar del parque es al amanecer, por lo que es recomendable salir de San Pedro sobre las 4-4:30 de la madrugada.
La entrada cuesta 10.000 pesos (unos 13€) e incluye la entrada al campo geotérmico y a una pequeña piscina termal que, además de no estar muy caliente, me decepcionó en comparación a otras termas que he disfrutado a lo largo de mis viajes, como los cientos de termas en Azores o el Blue Lagoon de Islandia.
– Explorar un campo geotérmico abandonado
Guiados por las aventuras anteriores de nuestro amigo Rabel en la zona de Atacama, llegamos a un campo geotérmico abandonado que nos gustó, impresionó y disfrutamos más que los propios Geiseres del Tatio.
Piscinas de tierra hirviendo, chimeneas de azufre escupiendo vapor sin parar y temblores en la tierra es lo que te encontrarás cada dos pasos en este lugar. He de reconocer que a todos se nos pusieron un poco las pelotas en la garganta, ¡pero lo disfrutamos un montón!
Las coordenadas para la localización exacta del lugar son estas: -22.364824, -68.008541. Introdúcelas en Google Maps para llegar y guarda el secreto un poco mejor de lo que yo lo he hecho! jaja
– Perderse por las carreteras del desierto
Como en casi todos los destinos de naturaleza y paisajes del mundo… ¡piérdete y explora todo lo que puedas! Nosotros al tener las furgonetas, pudimos recorrer cada carretera, camino y llanura que se nos antojó; y fue de las cosas que más disfrutamos de los tres días recorriendo Atacama!
– Subir el Cerro Toco (un 5.600m!)
Nuestra cima más alta coronada hasta el momento! Y es que, junto al Cerro Pintor al que subimos en Santiago, el Cerro Toco (con 5.604m) es más alto que ninguna montaña de Europa!
Una verdadera salvajada para alguien, como nosotros, que no somos profesionales de la montaña. La subida no costó mucho, pero esa tarde estábamos todos con un malestar y un dolor de cabeza insoportable!
Las vistas, como se aprecia en las fotos, son increíbles… ¡Qué maravilla la sensación de llegar a una cima de esa altitud y contemplar ese paisaje mientras echas el corazón por la boca!
Hay que tener mucha precaución con el tema del mal de altura. En el post de Mal de altura: Todo lo que necesitas saber tienes los mejores consejos y remedios para que lo lleves lo mejor que te permita tu cuerpo!
*A la cima llegué con Manu, un crack amigo de Rabel con el que la subida se hizo pan comido!
– Sentirse pequeño ante el Volcán Licancabur
Un gigantesco y perfecto estratovolcán de 5.920m que marca la frontera entre Bolivia y Chile e impresiona lo mires por donde lo mires!
Le pudimos ver en la distancia desde casi todos los puntos que recorrimos, y cada vez que le veíamos nos quedábamos con la boca abierta. ¡Qué maravillas regala la naturaleza, joder!
– Conocer y respetar la fauna local
Vicuñas, llamas, vizcachas, zorros, flamencos, armadillos… ¡un sinfín de animales increíbles que te encontrarás mientras recorres el Desierto de Atacama!
Respétales, no les des de comer y disfruta muchísimo de su belleza!
– Alucinar con el tamaño de los Monjes de la Pacana
Considerados los guardianes del Salar de Tara, estas gigantescas formaciones rocosas llegan a superar los 20 metros de altura. Su contraste con la llanura del desierto te hace dudar de dónde coño habrán salido esas rocas tan gigantescas y cómo llegaron a plantarse ahí. ¡Todo un misterio!
– Descubrir el Salar de Atacama
Aunque no pudimos recorrerlo entero, es un must de Atacama; recorrer una parte de su salar y perderse por sus carreteras de sal. La mejor zona está en la parte sur, aunque con las últimas lluvias se destrozaron casi todas sus carreteras.
Sea como sea, para salares te recomiendo el Salar de Uyuni, al que llegamos en un tour de 3 días desde San Pedro y que te resumo más abajo en este post!
– Pasear por la Calle Caracoles en el centro
Aunque San Pedro no tiene mucho que ver dentro del pueblo, la Calle Caracoles (la más transitada y turística) tiene mucho encanto para dar un paseíto después de un largo día recorriendo el desierto. Ahí podrás desde tomarte un zumo hasta contratar un tour. ¡Que empiece el regateeeeo!
– Contemplar los cielos estrellados
Aunque nosotros no hicimos ningún tour en San Pedro, es muy recomendable hacer uno para entender cómo funcionan las estrellas y maravillarte contemplando la Vía Láctea. Nosotros estuvimos días antes en el Valle del Elqui, donde pudimos disfrutar y pasear por el cielo como niños pequeños. ¡Elige un destino de los dos y alucina contando estrellas!
– Flotar en la Laguna Cejar
En mi opinión una recreación barata (aunque no tanto; su entrada cuesta 15.000 pesos/20€) del Mar Muerto, en donde puedes bañarte y flotar gracias a la elevada cantidad de sal en el agua.
No llegamos a entrar por su precio desorbitado y porque hay infinidad de cosas mejores que ver (y gratis) en el Desierto de Atacama!
– Hacer un tour al Salar de Uyuni
Una opción perfecta para cruzar de Chile a Bolivia recorriendo lagunas de colores, alucinando con paisajes increíbles, observando miles de flamencos y llamas y terminando en uno de los lugares que más me fascinaron de todo Sudamérica; el increíble, infinito y perfecto Salar de Uyuni.
– Conocer más y más de lo que ofrece el desierto
Aunque recorrimos un montón de lugares, ¡siempre hay más y más que ver! Según lo que busques en tu viaje podrás desde descubrir cráteres de meteoritos hasta deslizarte por una duna en una tabla de snowboard!
Porque, al igual que su desierto, ¡Atacama es infinita!
Después de tres días pasándolo como enanos recorriendo el Desierto de Atacama por libre, cruzamos a Bolivia haciendo el tour de tres días de Atacama a Uyuni; en el que recorrimos las lagunas altiplánicas y un montón de lugares único más para terminar en el increíble Salar de Uyuni.